viernes, 12 de mayo de 2017

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Boccherini acaba de asistir a uno de los "saraos " (fiestas-conciertos), organizado por su patrón, el Duque de Benavente-Osuna. En dicho sarao ha actuado Miguel García, fraile cisterciense, conocido por "padre Basilio", dando un virtuoso recital de guitarra. A este padre Basilio se le achaca la incorporación de la sexta cuerda a la guitarra y es muy admirado por su patrón, el Duque, el cual es, a su vez, un afamado guitarrista de su época. Boccherini se siente bastante atraído por esos ritmos y armonías tan seductoras que desprendía el fraile con su guitarra.

Tras este impactante encuentro, Luigi Boccherini, enfrascado en la producción de un grupo de 6 quintetos para cuerda, compone uno (el nº 2 del opus 40, catalogado por Yves Gerard como G. 341), en el que incluye en su último movimiento ese ritmo tan hipnóticamente atractivo que hace furor por los rincones de Madrid: el fandango. En él puede mostrar todas sus habilidades virtuosísticas en su propio instrumento, el violonchelo.

Finalmente su estreno tuvo lugar en los "saraos" organizados por el Duque de Benavente en su palacio de Madrid.

Este tercer y último movimiento: posee un tiempo Grave-assai, solemne y plácido a manera de introducción, que desemboca en el explosivo Fandango, rezumando ritmo vertiginoso y seducción melódica.

No se localiza el vídeo del quinteto en la versión original del autor para dos violines, viola y dos violonchelos.

Fuente:

http://apreciacionmusicalencuentros.blogspot.com.es/2013/10/l-boccherini-quinteto-para-guitarra-y.html


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